Preciosa senda costera situada en Muros del Nalón. Durante su recorrido, atravesaremos varios miradores, zonas de descanso y merenderos, uno de ellos provisto de zona de parrillas. Sus fenomenales vistas a la recortada costa asturiana y su recorrido corto y sencillo, hace que sea idóneo para pasar parte del día en familia o con amigos.
 
 
 
 

 
-Distancia realizada: 9 km
-Desnivel acumulado: Inapreciable
-Itinerario: circular o de ida y vuelta por mismo itinerario
-Dificultad: fácil
-Plano: 0013-3c
-Duración: 3 horas o pasar el día entero  por las playas
-Track en Wikiloc: No hay, lo veo innecesario.
 
 
La senda está perfectamente señalizada en todo su recorrido, teniendo varias fuentes durante su recorrido. Además dispone de varias zonas de descanso provistas de mesas y bancos, y otras zonas con techo de madera para protegerse del sol o lluvia.
 
La senda oficial comienza en la playa de Aguilar, terminando en la playa de el Garruncho, siendo así un recorrido de 4,5km de ida. Nosotros hicimos algo diferente, comenzamos en la ermita del Espíritu Santo (en lo alto de la playa de el Garruncho), que dispone de un parking. Desde ahí, recorrimos toda la senda hasta la playa de Aguilar donde comimos. Seguidamente subimos al pueblo de Muros y por carretera entre fincas, volvimos a enlazar con la senda costera, hasta volver al punto de inicio.
 
En esta ocasión, por la nula dificultad de la ruta nos acompaña una rapacita y dos chicas jóvenes, además de los que habitualmente nos reunimos. Nos vamos al parking de la ermita del Espíritu Santo donde aparcamos y nos acercamos al mirador que tiene detrás.
 
 Desde este mirador, la senda desciende por unas escaleras hasta la playa de el Garruncho, que nosotros no hicimos.
 
Desde el propio mirador nos ofrece vistas a ambos lados...a la derecha veremos el Peñón y la playas de las Arenas.
 
A la izquierda toda la costa que abarca las vista hasta pasado Cudillero.
 
Después de disfrutar de estas vistas costeras regresamos al parking y seguimos la senda hacia el Oeste. Los primeros 200 metros vamos paralelos a la carretera MU-2 que va hacia Muros.
 
 
Después de un kilometro de paseo llegamos al mirador de la Atalaya. 
 
Continuamos por la senda, dándonos vistas continuas de la costa hasta que un pequeño tramo donde la senda se adentra en un bosque para luego volver al limite de la costa.
 
 
 
 
Estamos en el mirador de los Glayos. Para acceder hay que salirse de la senda unos 200m hacia el limite de la costa. Está indicado el punto concreto donde hay que hacerlo.
 
Vistas al Este desde el mirador los Glayos
 
Vistas al Oeste desde el mirador los Glayos
Regresamos a la senda y mas adelante por la zona del Campón, veo una traza de senda que se adentra entre vegetación en dirección al mar. Como me picaba la curiosidad me adentro y a los 300 metros, antes de hacer un giro hacia la izquierda para volver a la senda buena, tendremos un pequeño balcón. En el regreso tenemos vistas a las playas de Xilo y Aguilar. 
 
En el regreso a la senda buena, la traza de senda se ensancha.
 
Ya sobre la senda inicial, pasamos por lo alto de la playa de Xilo.
 
Y aquí es donde la senda acaba en la playa de Aguilar.
 
Para hacer algo de tiempo, nos vamos al otro extremo.
 
 
 
Y después de pasearnos por la playa, nos vamos al merendero que está en la entrada a la playa. Este tiene un amplio parking, mesas y zona de parrillas (una 10-12 parrillas).
 
Después de una buena comilona, apetecía un café. Así pues nos acercamos hasta el pueblo de Muros, que está a poco mas de un kilometro. Subimos por la carretera, que tiene acera en su margen izquierdo durante todo el recorrido.
La plaza principal del pueblo de Muros es el techo del concejo de Muros del Nalón con 132m de altitud.
  Desde el pueblo volvemos a enlazar con la senda, pero antes habrá que atravesar una amplia zona de fincas, vamos que callejeamos un rato hasta que dimos con la senda....y de ahí por el mismo itinerario hasta los coches que están en la ermita.
 
Y como nos supo a poco, nos vamos en coche a la playa de San Juan de la Arena que esta pasando la ría. Recorremos toda la playa desde el muro hasta el mirador.
 
 
Desde el mirador cambia la perspectiva de la costa.
 
Y poco a poco se va notando el efecto del atardecer...toco cambia de color.
 
 
Después de haber disfrutado del atardecer, nos vamos al pueblo donde tomamos algo fresquito antes de volver a casa.